SaaS: conozca este modelo de computación en la nube

07 Junio 2023

Las dinámicas empresariales de adquisición de aplicaciones cambiaron radicalmente con la llegada de la computación en la nube Anteriormente, si una compañía necesitaba un software, debía comprar su licencia e instalar la aplicación en cada computador; aunque la empresa conservaba de forma permanente la app, para actualizarla necesitaba pagar e instalar de nuevo, en muchos casos un valor similar al del año anterior.

Así mismo, era software instalado en el PC, lo que consumía recursos de almacenamiento y memoria del PC; si el equipo fallaba, también la aplicación y, por consiguiente, la operación de la compañía podía correr riesgos. Además, al depender por completo de ese PC, si el usuario quería acceder a la información allí registrada era imposible.

La nube les ha permitido a las organizaciones evitar todos estos dolores de cabeza. Gracias a la masificación de las conexiones a Internet y a la velocidad en aumento de computadores y dispositivos móviles, hoy esas aplicaciones se ejecutan a través de la Red. El modelo se conoce como Software como servicio o Software por Demanda (SaaS, por su sigla en inglés, Software as a Service).

Es muy simple: la empresa paga por una suscripción (mensual o anual) a determinada app dependiendo del número de usuarios que la vaya a utilizar. La gran mayoría de aplicaciones se ejecuta desde un navegador, con lo cual el rendimiento no depende de la capacidad del PC de la persona; no obstante, algunas apps complejas sí exigen la instalación en el equipo, pero el modelo de pago como servicio se mantiene.

SaaS es un modelo muy popular actualmente y muchos lo utilizamos sin saberlo. Por ejemplo, cuando bajamos una aplicación en nuestro celular. Aunque está instalada en nuestro dispositivo y la usamos, la administración, actualización y sincronización de los datos se hacen de manera automática y no depende de nosotros sino del administrador que la opera desde la nube. Pensemos cuando compramos una licencia de Microsoft 365. Los programas son ‘instalados’ en nuestro PC, tableta o celular; con nuestro correo y contraseña le ‘decimos’ a la nube que ya pagamos y tenemos acceso, lo que nos da la opción de sincronizar, acceder a nuestros documentos y descargar actualizaciones cuando están disponibles. Si dejamos de pagar nuestra suscripción, el programa dejará de funcionar.

La pandemia del año 2020 sirvió como un catalizador para la innovación digital y la adopción de servicios en la nube. De acuerdo con el reporte ‘Tendencias anuales de tecnología’, de la firma de investigación sobre IT en las empresas Computer Economics, el 60% de las compañías asegura haber adoptado algún tipo de aplicación SaaS durante dicho año. “Cuando es aplicada correctamente, SaaS promete disminuir la infraestructura, tiene una mayor velocidad en implementación y es posible ahorrar costos iniciales”, explica David Wagner, vicepresidente de investigaciones de Computer Economics.

Se espera que este tipo de servicios crezca en adopción por parte de las empresas. Se calcula que el valor del mercado de SaaS para 2023 llegue a los 197.000 millones de dólares, según la firma de análisis e investigación Gartner.

Ventajas de usar SaaS

En la actualidad, muchas compañías han encontrado en el modelo de Saas la herramienta ideal para impulsar su negocio sin necesidad de preocuparse tanto por el tema tecnológico. Esto es clave hoy en un escenario que les exige a las empresas utilizar tecnología, pero que así mismo les ofrece la posibilidad de tercerizar administración y otros aspectos no asociados a su foco de negocio.

Entre las ventajas más importantes encontramos las siguientes:

- SaaS funciona a través de un modelo de suscripción que puede cambiarse en cualquier momento y ajustarse al tamaño y capacidad económica de las empresas.

- Como muchas aplicaciones están alojadas en la nube y no requieren instalación, el modelo permite ahorrar capacidad de procesamiento y almacenamiento en los dispositivos.

- El modelo garantiza que los usuarios siempre podrán tener la versión más actualizada de la aplicación.

- La actualización del software llega a través de Internet y en muchos casos se realiza de manera automática. De este modo, el equipo de TI no necesita preocuparse por hacerlo.

- Al funcionar con información que está en la nube, los colaboradores tendrán a su disposición los datos en prácticamente cualquier dispositivo y lugar.

- Las aplicaciones basadas en la nube permiten la sincronización de la información en tiempo real (siempre y cuando se cuente con una conexión a Internet), lo que aumenta la productividad y eficacia en la comunicación entre los equipos de trabajo.